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El placer de desayunar en Ámsterdam

No hay nada como un buen desayuno. Dicen que lo ideal para mantener la línea es desayunar como un rey, comer como un príncipe y cenar como un mendigo. Pues bien, nosotros nos lo tomamos al pie de la letra y nos adentramos en algunos de los cafés más curiosos de Ámsterdam. Para arrancar el día con energía, los holandeses suelen hacer un desayuno bastante completo. Les encanta el “slagroom” (chocolate caliente con nata montada), acompañado de los típicos pasteles de hojaldre holandeses conocidos como “saucijzenbroodje” y, por supuesto, los famosos crepes  “pannekoeken”. Vamos, una auténtica bomba calórica.

pannekoeken

 

Gebroeders Niemeijer

Especializados en brioches, panes de chocolate o tartas, en este local cercano a la Estación Central la perfección se lleva al extremo. Y la calve es su horno. Da gusto sentarse un rato para degustar cualquiera de sus productos, además es muy acogedor.  Se esconde en la calle Nieuwendijk, número 35.

Hotel Pulitzer

Un rincón mágico que encontraréis en el  número 315 de Prinsengracht. Tienen buffet o desayunos a la carta. Pero lo mejor del sitio, sin duda, son sus vistas. Desde allí, mientras os tomáis un buen croissant, podréis contemplar dos de los canales más pintorescos de Ámsterdam: el Keizerstraat y el Prinsengracht.

Hotel de L´ Europe

Es típico su desayuno continental, un lugar muy frecuentado por los turistas. No tiene que envidiar nada a otros cafés porque su ubicación es excepcional. Se sitúa frente a la famosa Torre de la Moneda en un edificio construido a finales del siglo XIX. Las vistas: al río Amstel.

Café Americain

Este café, situado dentro del Ámsterdam American Hotel muy conocido por su “Brunch Jazz” de los domingos. Allí degustaréis de un delicioso tentempié en uno de los sitios más chic de la ciudad. ¿Dónde?, pues en Leidsekade 97.

Nielsen

Si lo que buscáis son productos orgánicos para desayunar, vuestro sitio es este. Os recomiendo probar la rosca de pan recién horneada y, por supuesto, las deliciosas tortillas ecológicas. Si os va este tipo de establecimientos, apuntad: número 19 de Berenstraat.

Le Pain Quotidien

Más que el desayuno, allí es muy habitual acudir a tomar el brunch. Aunque hay que decir que su punto fuerte es el pan. Hasta allí llega gente de todos los rincones de la ciudad exclusivamente para comprarlo. Algo debe de tener. Tienen varios locales en Ámsterdam, pero el más conocido está en Spuitraat.

Singel 404

Es un lugar para sentarse y simplemente disfrutar de las vistas. A vuestros pies, de nuevo, los canales. Es uno de esos rincones donde perderse a la hora del desayuno o del brunch solo o acompañado. Y para comer tienen una enorme variedad de bocadillos, más de los que creíais conocer.

 De Bakkerswinkel

Sus panaderías son famosas en todo el país, pero especialmente concurridas en Ámsterdam con 3 locales. Las colas, en el mejor de los casos, suelen dar la vuelta a la manzana y eso es por algo. Si vais a De Bakkerswinkel, tenéis que probar uno de los bollos más demandados: relleno de yogur y muesli. Perfecto para mantener la línea.

 

@DianaRPretel