Si hay una ciudad en el planeta que está irremediablemente condicionada por su aura de destino culto, ésta es, sin duda, Viena. Se la asocia a grandes producciones de ópera, a la música clásica, a sus concurridos museos y a sus cuidados emplazamientos patrimoniales. Pero la antigua capital del antiguo Imperio Austro-Húngaro puede ofrecer otra cara lúdica al viajero: la de la noche vienesa. Aunque ordenada y exquisita, su vida nocturna gira alrededor de discotecas (en las afueras y el extrarradio) con música en vivo y en directo, magníficos clubs de jazz, tabernas típicas con vinos locales y bares donde se sirve cerveza y algún tentempié ligero de la cocina local.
El viajero de paso por Viena no debe perderse el conocido como Triángulo de las Bermudas (Bermuda Dreieck) situado en el primer distrito, junto al Canal del Danubio y entre el antiguo Barrio Judío o Seitensttettengasse Rabensteig y la Ruprechtsplatz. En esta plaza (una anécdota para los amantes del arte) se encuentra una de las iglesias más antiguas de Viena. Pues bien, hasta 1980 la zona era totalmente anodina y se encontraba vinculada al comercio textil. Todo ello cambió cuando un astuto comerciante se le ocurrió abrir un pub al estilo de las antiguas posadas austriacas. Su nombre “Krah-krah”, en alusión a los cuervos. Muy buena cerveza, que estamos en la zona de influencia alemana, comida local a base de pan y música en directo. La iniciativa tuvo tanto éxito que, muy pronto, otros se apuntaron a la nueva tendencia inaugurando otros bares, pubs y clubs. Hoy la zona está tremendamente concurrida, hasta altas horas de la madrugada, por estudiantes y viajeros llegados desde todos los puntos del planeta.
Una ciudad tan volcada en su tradición musical como es Viena no puede dejar de lado los ritmos de blues. Y si su conocido Festival Internacional de Jazz (que se celebra a inicios de verano) atrae a melómanos internacionales, la capital, además, ofrece un buen puñado de buenos locales con música en vivo y en directo durante todo el año. Con ambiente clásico, algunos ofrecen cenas ligeras. Porgy and Bess, Jazzland, Jazz Club Wien son imprescindibles de la noche vienesa. Las discotecas y locales de moda, casi todos en el extrarradio, pero con buenas comunicaciones con el centro, participan también de esta filosofía de los conciertos en vivo y en directo. En Babu y Passage el ambiente no decae durante la madrugada. Los DJs y las fiestas temáticas son el punto fuerte de Sass Music Club Viena. Imposible colocar en este espacio todas las direcciones y referencias así que invito al viajero a bucear en esta guía con reseñas detalladas de locales de moda
https://only-apartments.com/guide/category/vienna/nightlife-vienna/
La tradición de bares, pubs y cerveza en Viena sigue viva. Pequeñas y recoletas bodegas conviven con buenas referencias internacionales. La parroquia suele congregarse alrededor de partidos televisados de fútbol o rugby, comida y buena selección musical. Muchas de estas direcciones (remitimos, de nuevo, a la guía) ofrecen un ambiente distendido, sano y apto, incluso, para familias.
Selectas cafeterías y restaurantes de moda completan la oferta de ocio nocturno de la capital austriaca. Hay de todo y muy bueno. Para caer rendidos en vuestros apartamentos en Viena donde no están permitidos ni el ruido ni la fiesta. ¡Qué disfrutéis!