Adentrarse en el Barrio Rojo de Ámsterdam es una experiencia en sí. Allí no hay prejuicios, ni tabúes, tampoco hay pudor ni virginidad, sin embargo sí hay reglas. Cada una de las mujeres que ofrece sus servicios debe contar con una licencia especial para ejercer como prostituta, pagar sus impuestos y haber pasado los correspondientes controles sanitarios. Con esto quiero decir que el hecho de la que prostitución sea legal en Holanda normaliza la situación y hace del famosísimo Barrio Rojo un lugar excepcional, elegante y limpio. Eso sí, inundado de neones.
Pequeños locales de cara al público, con escaparates en los que las mujeres se exhiben como modelos para aquellos que quieran pararse y pasar un buen rato. Y para quien crea que en el Barrio Rojo todo son prostitutas, estáis equivocados. Hay una inmensa oferta de sex shops, cines porno y espectáculos eróticos en vivo. Ahí van algunos ejemplos:
Teatro Casa Rosso: En el exterior mucho frío, y dentro calor carnal. No es un teatro nada habitual, para empezar porque los actores van desnudos y por el tipo de gente que asiste a estos espectáculos. Es el santuario del porno en directo. Puro morbo. Ver, oír, pero no tocar. Serás un mero espectador entre gente muy diversa. Hay holandeses, clientes habituales y muchos turistas que suelen acudir en pareja para entrar en calor. Y por supuesto, todo muy discreto. A quien hace ruido le echan del local. Entras, te sientas en tu butaca y simplemente observas. La entrada a este curioso teatro del sexo vale unos 40 euros por persona y 50 con 2 consumiciones. Cómo llegar? es fácil: Oudezijds Achterburgwal 106-108, o preguntad por el Teatro Casa Rosso. No tiene pérdida, en la entrada encontraréis un enorme elefante rosa de neón. Es inconfundible.
Museo erótico: En este peculiar museo hay esculturas, cuadros, fotografías, libros, películas subidas de tono y todo tipo de artilugios y juguetes eróticos. Son 3 plantas de exposiciones relacionadas con el sexo y el Barrio Rojo. Por ejemplo veréis auténticas reliquias como el primer consolador femenino, una bicicleta en la que al pedalear se activa una especie de pene. Cuenta con una sala dedicada exclusivamente al sadomasoquismo. Y entre las colecciones que conservan, es interesante destacar los retratos que el gran John Lennon hizo durante su protesta pacifica en el Hotel Hilton de Ámsterdam allá por el año 69. La entrada: 5 euros por cabeza. Y ¿Dónde está?. En la misma calle que Casa Rosso y muy cerca de la Estación Central, en el número 54 de Oudezijds Achterburgwal.
Bananenbar: ¿Y qué sería del Barrio Rojo sin una sala de streeptease? Pero el Bananenbar no es una sala normal. Es un lugar de encuentro y de celebración en el que las camareras, con poco ropa, se encargarán de que siempre tengáis la copa llena. Os seducirán, os darán de beber y se tocarán entre ellas. Es un lugar ideal para celebrar una despedida de soltero o vuestro 18 cumpleaños. Si os atrevéis a acudir a Bananenbar (en la calle Oudezijds Achterburgwal, número 37), os aseguro que nunca lo olvidaréis.
Twitter: @DianaRPretel