Capri, una pequeña joya en la Campania

Cuando pienso en una joya, me viene a la cabeza algo brillante, elitista, espléndido, luminoso, capaz de capturar todas las miradas. Por eso, cuando pienso en Capri, pienso en una joya. Una joya en la Campania. Con sus rincones maravillosos, vistas que quitan el hipo, paisajes de pura naturaleza y los Faraglioni que todo el mundo conoce. El listado de sus encantos es infinito… Hoy quiero hacer una ruta con vosotros en esta isla tan bonita. ¿Listos?

MARINA GRANDE Y MARINA PICCOLA

Marina Grande es nuestra primera parada en Capri, entre otras cosas porque los barcos llegan aquí, es el único puerto de isla. A vuestra llegada, no podéis perderos la playa pública de Marina Grande, la más grande de la isla; es una auténtica perla y es el lugar perfecto si queréis observar los Faraglioni. La leyenda cuenta que aquí fue justo aquí donde Ulises cayó en la tentación del canto de las sirenas.

 

I FARAGLIONI

Empezamos nuestra ruta por Capri con los Faraglioni: tres rocas en el medio del mar…aunque en realidad son mucho más que eso. Haciendo una excursión os quedaréis impresionados con su tamaño y el modo en que el azul del mar resalta su belleza.

¿Sabíais que cada uno de ellos tiene un nombre? El primero es llamado Stella, el segundo Faraglione di Mezzo, mientras que el último recibe el nombre de Faraglione di Fuori. ¿Y sabíais que en este último Faraglione vive una especie de reptil conocido como la Lagartija Azul? Se cuenta que el animal ha tomado estos colores del mar y del cielo para camuflarse.

Si después de la excursión en el barco queréis relajaros en la playa, os aconsejo ir justo allí al lado; donde podréis degustar los platos típicos de la zona.

 

LA GROTTA AZZURRA

Entrar en esta cueva es impresionante. El color del mar tiene un azul único y sus reflejos son maravillosos. Al entrar en la cueva, es todo oscuridad, pero en seguida empieza a tomar color. Es una coloración que depende básicamente de la luz que entra en la cueva, lo cual le otorga un carácter casi mágico. La ruta con el barco a la cueva dura casi 10 minutos, está disponible todo el año, aunque obviamente depende de las condiciones meteorológicas

 

LA PIAZZETTA DI CAPRI

Ahora hemos llegado al centro de Capri, estamos en la famosa Piazzetta con sus bares, tiendas, joyerías y restaurantes. ¿Por qué no empezamos con un típico aperitivo italiano? Seguimos dando un paseo por las tiendas y acabamos en un restaurante y disfrutamos de la cocina típica de esta región. Pasear por Capri siempre es una experiencia mágica, escuchar artistas cantar canciones por la calle y admirar toda su belleza en cada rincón. La parte que más me gusta es la vista que se ve desde la plaza…y por la noche toda iluminada es preciosa.

 

LOS JARDINES DE AUGUSTO Y LA VÍA KRUPP

En la zona sur de la isla, nos encontramos con una curiosa construcción: un largo camino de curvas serpenteantes que comunican Los Jardines de Augusto con la Marina Piccola. Es la Vía Krup, un capricho del magnate alemán Alfred Krupp que en 1899 quiso poner fin a la paliza que le suponía subir y bajar desde los Jardines hacia la costa. ¿Qué mejor que una travesía de 1km 300m construida en zigzag para superar el desnivel? El resultado fue esta maravilla arquitectónica, desde la que se puede contemplar una de las panorámicas más espectaculares de la isla de Capri, con Faraglioni incluidos.

Podemos decir que Capri ofrece de todo: mar, playa, comida, tiendas, lugares relajantes y vistas que hacen soñar.