Español
A Venecia hay que ir para admirar sus canales, para disfrutar de sus paseos en góndola o del amanecer en la Plaza de San Marcos.
A orillas del Adriático, su gran pasado aristocrático y rico ha quedado impregnado en las fachadas de sus palacios y sus templos. Pero Venecia, es algo más, y también puede ser un magnífico destino para adquirir objetos preciosos y únicos.
Sin lugar a dudas, una de estas artesanías que han sobrevivido a la modernidad y al tiempo es la del cristal de Murano que se realiza, según las técnicas ancestrales del vidrio, en la cercana isla homónima (a la que se accede cómodamente en barcos motorizados que en góndola hay que remar bastante).
La particularidad del cristal de Murano es que se insertan partículas colorantes en la mezcla a soplar. Con estas piezas en vibrantes colores (no hay que perderse, sobre todo, el azul) se hacen composiciones artísticas de todo tipo y al alcance de todos los bolsillos: desde lámparas suntuosas para colgar en mansiones aristocráticas hasta pequeñas piezas de bisutería, más manejables y fáciles de transportar en los viajes modernos.
La mejor idea es que eches un vistazo a los distintos objetos, modelos y precios disponibles vía online y, una vez estés en la Ciudad de los Canales, acercarte hasta la isla e investigar en sus distintas factorías, comprobar la calidad y comprar según presupuesto.
Si vas a adquirir algo para tu casa, recuerda que puedes probar primero en alguno de los apartamentos en Venecia que hayas alquilado y así hacerte una idea de cómo quedará en tu hogar.
