Budapest es una ciudad singular con una ecléctica mezcla de antiguo y nuevo que la convierte en un paraíso arquitectónico. Caminando por cualquier calle, seguro que encuentras alguna maravilla de la arquitectura. Desde ruinas romanas hasta elegantes construcciones góticas y renacentistas pasando por preciosos baños y mezquitas otomanas e iglesias barrocas, sin olvidar la simetría clásica, la arquitectura de Budapest es una auténtica maravilla.
Mientras es difícil caminar un sólo quilómetro sin ver alguno de estos ejemplos, hay algunos lugares que no te puedes perder para nada del mundo. Estos edificios sobresalen en una ciudad que es prominentemente arquitectónica, convirtiéndolos en obras de arte de la arquitectura que no te querrás perder.
Teatro Nacional
El Teatro Nacional acomoda a 619 personas y fue diseñado por Mária Siklós, inaugurado el 15 de marzo de 2002. Fue construido para ocupar el puesto del antiguo Teatro Nacional Húngaro, que fue derrumbado por el gobierno comunista en el año 1964.
El nuevo teatro está a orillas del Danubio, entre Soroksári, el Gran Boulevard y el Puente Lágymányosi. El edificio en si es fascinante, y el parque que lo envuelve es de gran belleza, con varios tributos a la industria dramática y cinematográfica húngara.
Palacio de las Artes
Esta imponente estructura se extiende 10.000 m2 y se ha convertido en el centro cultural de la ciudad. El Palacio es la casa del Auditorio Béla Bartók, el Museo Ludwig y el Teatro Festival, convirtiéndolo en un eje central para la música, la danza e incluso actividades infantiles. Pulcras columnas mantienen los altos techos y su terraza con impresionantes vistas panorámicas de toda la ciudad quita el hipo.
Teatro Nacional del Cine Uránia
El Uránia combina estilos arquitectónicos tan contrastados como morisco oriental y gótico veneciano. Se alza como un precioso hito singular de la ciudad, con su fachada blanca y sus impresionantes balcones y ventanas de arco.
Uránia es el lugar donde se produjo la primera película húngara y donde se proyectó una por primera vez en el país. Este lugar también acoge eventos y festivales de cine, además de ser un escaparate para películas húngaras.
Iglesia de Santa Ana
Con una gran variedad de iglesias dispersadas por toda la ciudad, la de Santa Ana a veces se pasa de largo. De todos modos, para los amantes de la arquitectura, esta iglesia es un edificio que no se pueden perder, ya que se considera uno de los ejemplos más impresionantes de arquitectura barroca en Budapest.
La construcción de la iglesia empezó en 1470 y tardó 21 años en completarse. Durante el s.XX, se restauró extensivamente y la iglesia ha recuperado su gloria pasada. No te pierdas los preciosos frescos hechos por Pal Molnar C.
La Tumba de Gül Baba
Una tumba raramente se considera una maravilla arquitectónica, aunque la tumba octogonal de Gül Baba rompe ese molde. Este derviche poeta otomano Bektashi fue uno de los compañeros más cercanos al Sultán Suleiman el Magnífico y, cuando el poeta murió, el sultán lo declaró el patrón de la ciudad.
La tumba fue construida entre 1543 y 1548 y es una muestra fascinante de arquitectura otomana. Las ocho paredes de piedra soportan una cúpula cubierta con placas de plomo y baldosas de madera.