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GLOBAL SHORT RENTALS

Festival de Jazz de Viena

La que un día fuera capital de un Imperio, del Austro-Húngara, hoy alardea de ese pasado glorioso mostrando cientos de caras diferentes. Impresionantes palacios (el Imperial de Holfurg, el espectacular Schönbrunn con su sucesión de jardines a la francesa, los hermanos del Belvedere…), amplios jardines (como el Prater) y tantos museos que se ha habilitado un barrio entero para ellos… esperan al visitante con su rumor de pasos lejanos y voces cercanas. Pero Viena ofrece aún más. El viajero en busca de belleza no se va a alimentar solo de arte plástico.  Porque, ¿qué podemos decir de su animada vida musical?

 jazz viena

¿Quién no conoce el televisivo Concierto de Año Nuevo o los que se celebran en los días señeros de Adviento? ¿Y quién no suspira por poder asistir a una de estas galas? Desde luego, cualquier melómano que se precie de serlo. Pero, si el viajero se encuentra en Viena a principios de verano, cuando sus coloridos macizos de flores recortados por setos engalanan toda la ciudad, hay una cita ineludible que no debe perderse: El Festival de Jazz de Viena.

Desde el 25 de junio hasta el 9 de julio, durante dos intensas semanas, se dan cita, en distintos emplazamientos de la ciudad, uno de los más concurridos (por calidad e intensidad) festivales de música del mundo. Viena se mueve en torno a estos ritmos primigenios del Misisipi y la ciudad al completo se prepara para la cita. La Ópera Estatal de Viena, el Konzerthaus, la galería y la Plaza del Ayuntamiento, el Jazzland, las salas Porgy & Bess, Miles Smiles o Wuk  quedan a disposición del melómano, ofreciendo sin tregua no solo un concierto tras otro sino también documentales, películas ambientadas en los protagonistas del blues, conferencias, charlas, cursos magistrales… y todo aquello que pudiéramos pedir a la música. 

Dividido en cuatro secciones (Talentos emergentes, Voces legendarias, Maestros de la guitarra y Alrededor del mundo), se podrá disfrutar con los sonidos inconfundibles de Melody Gardot y su banda, Eric Burdon, Keith Jarrett…  Como viene siendo habitual en los eventos del siglo XXI, compra de entradas, información, programación y noticias están disponibles en la página Web habilitada al efecto http://www.viennajazz.org/

El jazz tiene sus incondicionales, no hace falta que lo ponga aquí. El swing oriundo de las tierras sureñas de Norteamérica, allí donde hombres y mujeres desprovistos de libertad espantaban una vida dolorosa dedicada a un trabajo duro con unos sones casi rituales, se ha ido extendiendo por otros rincones del mundo. El jazz canta a la soledad y a la pérdida, al dolor y al amor, a la injusticia y a la heroicidad, al terruño local y a todos los habitantes del planeta, por eso ha logrado arrebatar los corazones de quienes encuentran en la música alimento para el alma y bebida para el espíritu. Sale, como el flamenco, de las entrañas; es universal y personal; está estudiada, pero se espera de ella una buena improvisación que no puede recoger el disco. Porque si hay un estilo nacido para ser disfrutado en vivo y en directo, éste es el jazz. 

En el vídeo Meldoy Gardot con su “Baby, I’m a fool”. Música, vistas desde tus apartamentos en Viena buena compañía, una bebida… Y que el mundo, si quiere, gire a ritmo de jazz.