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Pasión que enciende hasta el más flemático es el flamenco. Esa mezcla de música, baile gitano y morisco que ha sido considera Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad el 2010 por la UNESCO y que desde el 8 al 31 de diciembre estará deleitándonos en el Palau de la Música de Barcelona con el espectáculo Gran Gala de Flamenco.
Este espectáculo, de talla internacional, atrapa al espectador en la nostalgia y pasión de una música y un ritmo que es toda cadencia y armonía. Uno de los atractivos de esta puesta en escena es que en ella están los representantes de una nueva generación de artistas, que al igual que sus antecesores marcan con los taconeos las diferentes expresiones del flamenco. Para esta Gala en particular se presentaran espectáculos de Fandango, Seguidilla, Farruca, Guajira, Soleá por Bulerías y Alegrías.
El flamenco nace en el siglo XVIII en Andalucía. Si bien sus orígenes son materia de apasionada discusión de músicos, antropólogos, historiadores e incluso la Real Academia de la Lengua Española, que lo define como de origen gitano, la mayoría se inclina a la tesis del mestizaje y la conjunción de la cultura andaluza, con árabes, musulmanes, cristianos, gitanos y judíos.
Según Blas Infante Pérez de Vargas, la voz flamenco proviene de la expresión andaluza fellah min gueir ard cuyo significado es: campesinos sin tierra. Esta denominación se les dio a los muchos moriscos que se integraban a las comunidades gitanas, con quienes compartían la marginalidad social, la exclusión por pertenecer a grupos étnicos que eran rechazados y ese encuentro dará origen al flamenco, que era un canto de libertad ante el intento de aniquilamiento cultural. Si bien esta teoría parece interesante, lo cierto es que no tiene asidero científico basado en documentación o recopilación de memoria oral.
El flamenco tiene tres facetas: el cante, el toque y el baile. Existen variantes en el flamenco que se relacionan con el origen de él y las expresiones que se derivan del canto y el toque y el baile. Uno de ellos es el Farruca, su particularidad es la cadencia con claras reminiscencias gaditanas y de sonidos melancólicos. El baile es viril y con taconazos y redobles fuertes, que demuestran que quién domina la escena es un macho de actitudes dominantes, sin embargo se debate en esa melancolía existencial de su cultura.
Otro palo del flamenco es el Fandango, que se dice derivaría del vocablo portugués fado que designa a un baile y música local. Esta expresión es más libre y lúdica y es un cante de coplas que tiene cuatro versos octosílabos, que muchas veces por repetición se convierten en más. Se le reconoce como uno de los estilos más antiguos del flamenco, aunque ahora hace parte de los gustos y agenda de artistas más contemporáneos.
Animadas también son las Soleá por Bulerías, un cante de origen jerezano y con melodía muy festiva y bailable. Interpretes como Enrique Morente, Juan José Amador, entre otros, han inmortalizado estos sonidos.
También están las Seguidillas, un tipo de canto español acompañado de las castañuelas, bandurrias, guitarras y laúd, en compás de 3/4 o 3/8 de la cual se derivan variados otros ritmos como el fandango y el bolero.
Para más información: https://vendaentrades.palaumusica.org/SeleccionZonas.asp?Temporada=2011&Ciclo=OF&Funcion=01&Idioma=cat
Una gran apuesta para divertirse este fin de año y no pensar en lo que vendrá en el 2012 es pasar unos días de placer infinito en apartamentos en Barcelona Además puede reservar sus entradas para ver este espectáculo de flamenco y llenarse de pasión gitana. Se lo recomiendo sin ninguna duda.
