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San Nicolás, tradicionalmente asociado a la Navidad, será la estrella de una gran celebración el 17 de noviembre de 2013 en los Países Bajos. De todos modos, esto no es una celebración cualquiera; es una arraigada tradición holandesa que nunca deja de sorprender a los mismos holandeses y a los visitantes.
A la espera de la llegada de San Nicolás, las calles, casas y tiendas de todo el país se decoran con imágenes del afable viejo vestido de rojo con barba blanca.
Aunque no parece claro por qué Sinterklaas vive en España, cada año, en el mes de noviembre, llega a Amsterdam con sus asistentes, los Zwarte Pieten (los Pedros negros). Con elegantes trajes medievales, Sinterklaas y sus asistentes navegan por las preciosas aguas del río Amstel a la vez que las familias disfrutan de su colorida comparsa desde las orilla. Este alegre evento termina a las doce del mediodía en el Museo Marítimo de Amsterdam (Scheepvaartmuseum), dónde Sinterklaas y sus asistentes son dados la bienvenida por el alcalde.
Foto: Sander van der Wel
A las doce y media, Sinterklaas se sube a Americo, su hermoso caballo blanco, y se dirige hacia la famosa Plaza Dam en otra comparsa llena de color y alegría liderada por sus amados asistentes, que lanzan miles de caramelos a la gente que disfrutan de este evento con música y danza. En la Plaza Dam, encontrarás miles de familias alargando el cuello para poder ver la llegada de Sinterklaas. Varios espectáculos de acrobacias y los Zwarte Pieten, que no dejan de lanzar caramelos hasta que todo el mundo tenga por lo menos uno, también amenizan la fiesta.
Empezando el 17 de noviembre y hasta el 6 de diciembre, Sinterklaas y sus fieles asistentes bajan por las chimeneas para recoger las zanahorias que los niños que se han portado bien han dejado para su caballo. A cambio, los asistentes llenan sus calcetines con dulces tradicionales (pastelitos de miel, monedas de chocolate, caramelos de mazapán y figuritas de almendras).
Esta tradición holandesa tiene varios orígenes, incluyendo el dios germánico Wodan, que se representa normalmente como un hombre alto y fuerte con una larga barba blanca, siempre volando en su caballo blanco. De todos modos, la historia más común es sobre San Nicolás, un rico hombre cristiano que decide dar todo su dinero a los pobres. Luego, se convirtió en el arzobispo de Myra (hoy en día en Turquía) y gracias a sus grandes obras, incluyendo varios milagros, se convirtió en un santo.
San Nicolás murió el 6 de diciembre del año 342 y en el 1089 sus restos fueron transportados a la ciudad italiana de Bari, que durante mucho tiempo estuvo bajo dominio español. Quizás por eso se dice que Sinterklaas aún vive en España.
Debido a que los emigrantes holandeses en América del Norte celebraban Sinterklaas, esta tradición se convirtió en parte de las celebraciones americanas que luego se combinaron con Navidad, convirtiendo a Sinterklaas en Santa Claus.
Esta fiesta también se celebra en la zona flamenca de Bélgica; Luxemburgo, Alemania, Austria, Suiza, Francia, la República Checa, Eslovenia y Polonia.
Así que ya sabes, si vienes a Amsterdam el día 17 de noviembre, podrás sorprender a tus hijos con una fiesta de Navidad anticipada, algo que seguro emocionará a pequeños y mayores.
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