El Gran Teatro del Liceo es un símbolo de la ciudad de Barcelona ya que por sus escenarios pasaron los artistas más reconocidos del mundo y desde su creación no deja de cautivar al público con su arquitectura, su acústica y su encanto mágico cuando la música está sonando.
Construido en 1838, en sus comienzos el Liceo sirvió como escuela de arte donde se enseñaba teatro, canto y música italiana. En la actualidad el edificio es público y toda la población puede disfrutar de las obras que se brindan en él, o participar de los concursos o asistir a la escuela del Petit Liceu para tomar clases de ópera.
Como emblema de la ciudad, el Liceo sufrió atentados e incidentes que casi lo destruyen en su totalidad. Como cuando en 1861 se incendió o en 1893 un representante del anarquismo hizo explotar una bomba en la platea del teatro.
Pero el mayor atractivo que conserva el Gran Teatro del Liceo es su siempre exquisita propuesta cultural, brindando cada temporada una mejor oferta para los espectadores. Visitar el Liceo, sentirse adentro de él, parte de la historia universal de la ópera y vibrar al ritmo de la música no tiene precio.