La importancia de viajar con calzado cómodo

Generalmente, nuestros pies son los miembros del cuerpo que más sufren cuando estamos fuera de casa. Dicen que prevenir es curar y en este caso se repite el dicho. Os proponemos diferentes modelos de zapatillas para trekking – para montañeros expertos y aficionados-, calzado para pasear por la playa e incluso ideal para caminar por zonas rocosas.

Todos aquellos que quieran experimentar el contacto con la naturaleza, ya pueden tener la sensación de ir descalzos en plena montaña. Os recomiendo las zapatillas conocidas como Barefoot. Para los que nos las conozcáis tienen forma de calcetín con dedos y suela. Sin duda, su ventaja principal es la comodidad. Sientes cómo es realmente el terreno que pisas y sin miedo a resbalones, gracias a sus adherentes y a su resistencia capaz de aguantar el peso de una persona en una pendiente, por pronunciada que sea. Las Barefoot las vi por primera vez en Nueva Zelanda cuando no eran nada habituales y me parecieron una idea curiosa, pero extraordinaria.

Para hacer senderismo, a un nivel bastante más tranquilo o para pasear por la calle, hay marcas especializadas. Por ejemplo Callahang Adaptaction y Geox se caracterizan por su comodidad, de rápida adaptación al pie y fácil transpiración a través de sus flexibles suelas. No son baratas. Aunque si no estáis acostumbrados a caminar demasiado en vuestro día a día y no tenéis unas zapatillas ya domadas, este tipo de calzado os puede ser muy útil. Y lo mejor que tiene es que tanto las Callaghan Adaptaction como las Geox son muy ligeras, no pesan.

Para mí lo mejor es la marca Gore-Tex, siin duda. Es un calzado duro, resistente y a la vez muy flexible con el que caminar horas y horas. Sentiréis el tobillo ligeramente presionado para intentar no padecer torceduras. Un tejido transpirable e impermeable.

Ahí van algunas claves para evitar posibles lesiones: Es importante que a la hora de planear el viaje penséis en llevar calzado adecuado con el que evitar que se os resientan los pies y las rodillas.

• Consejo nº 1: Llevad unas zapatillas o botas ya usadas y adaptadas perfectamente a la forma de vuestro pie. Si no son las habituales, estrenadlas unos días antes del viaje.

 

• Consejo nº 2: Usard calcetines que os cubran el tobillo. De esta forma se produce una pequeña presión y el tobillo permanece sujeto frente a posibles torceduras o esguinces.

 

• Consejo nº 3: Es necesario que podáis mover los dedos con holgura. Y que no sintáis presión en ningún otro punto.

 

• Consejo nº 4: Es muy útil llevar apósitos, tiritas y vendas. Evitaréis infecciones y las rozaduras no serán un problema en el resto del viaje.

 

• Consejo nº 5: Es importante mirar bien dónde se pisa. Una piedra mal colocada en el camino o un charco pueden hacer que os escurráis. Si eso ocurre, podéis llevar también una crema de frío / calor (tipo Reflex).

 

• Consejo nº 6: Estirad tobillos y gemelos antes y después de una caminata. Así no se os resentirán los músculos.

 

• Consejo nº 7: Y, sobre todo, una vez bien calzados, mi consejo es que disfrutéis del paisaje.

 

DianaRPretel

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