Fiestas populares de verano en España

¿Tenéis pueblo? En este post os propongo que nos vayamos de fiestas. Las hay religiosas, paganas, taurinas, anti-taurinas, curiosas y, sobre todo, las hay muy divertidas. Estamos en pleno verano y precisamente esa es la época del año en la que se celebran más fiestas patronales en los pueblos españoles. Contamos con 8.122 municipios, así que no hay excusa para no pasárselo bien.

Las uvas de Nochevieja en pleno agosto

En el municipio granadino de Bérchules se celebra desde 1994 la Nochevieja estival. No se han vuelto locos, no. Lo que pasa es que ese año se fue la luz en el pueblo y los vecinos no pudieron tomarse las uvas. Desde entonces instauraron la tradición de tomar las uvas en verano y, por si acaso el siguiente no pueden, celebran el 31 de diciembre el primer fin de semana de agosto. Mejor prevenir que curar. Y lo más importante, los berchuleros no volverán a quedarse sin Nochevieja.

La Tomatina

La Tomatina de Buñol, para quien no la conozca, consiste en lanzamiento de tomates, concretamente este año 145.000 kilos de tomates maduros. Es un reclamo publicitario internacional, que atrae a turistas de decenas de nacionalidades y a jóvenes llegados de todos los lugares de España que buscan adrenalina y diversión. Y es que esta localidad valenciana recibe cada año nada más y nada menos que 40.000 visitantes, multiplicando incluso por 4 el número de habitantes. La de este 2015 es la 70 edición de la Tomatina.

La danza de los enanos

Esta tradicional danza veraniega de Santa Cruz de La Palma  (Canarias) no tiene desperdicio. Para que os hagáis una idea: 24 hombres bailan al son de una polca mientras recorren el pueblo, después entran en una caseta y salen transformados en enanos con una gran cabeza y un mini-cuerpo. La danza de los enanos se le dedica a la Virgen de las Nieves cada 5 veranos, y se celebra en los años acabados en “0” y en “5”.

El Colacho

foto: asir.thomas

Se celebra por el Corpus en una pequeña localidad burgalesa que se llama curiosamente Castrillo de Murcia. Sus fiestas patronales tienen tal atractivo que fueron declaradas de Interés Turístico de Castilla y León. Bueno ¿de qué van las fiestas?. Para empezar hay que decir que el Colacho es un estrambótico y llamativo personaje en forma de diablo que salta por encima de los niños recién nacidos en el pueblo con la intención de librarles del pecado original. Desde luego, éste es un espectáculo digno de ver. Los hombres de Castrillo de Murcia se disfrazan de demonio y ejercen de Colacho, mientras sus madres se sienten orgullosas de participar con sus pequeños en esta especie de ritual popular.

A la caza del pato

Son una fiestas que se celebran en Sagunto, Valencia, y no exentas de polémica. Consiste en nadar e intentar atrapar los 110 patos que los lugareños lanzan desde sus barcos. Cada 15 de agosto se organizan unas cucañas marítimas cuerpo a cuerpo: hombre – pato. Algo que no está exento de polémica y que ha sido muy criticado durante años por ecologistas, plataformas contra el maltrato animal y diferentes asociaciones de protección de la naturaleza. Tanto es así, que la fiesta fue prohibida de 2006 a 2011 después de que el ayuntamiento se viera obligado a multar a algunos de los participantes. Lo cierto es que el momento “patos al agua” de Sagunto es ya una tradición que data del año 1946.

Twitter: @DianaRPretel