El rock alternativo en el mundo no puede encontrarse en un peor estado de crisis. Todo lo bueno que sonó en las radios, hoy en día es solo un recuerdo. Cuando todavía había esperanza en el rock, de su capacidad de cambio y actitud en las radios, nos llegó la ola de Britney Spears, Rihanna, Justin Bieber y Lady Gaga, y simplemente ya no hay espacios en los grandes medios de masas para el buen rock. Con los noventas, toda la escena de rock independiente y alternativo explotó, y todo el mundo supo de bandas que estaban probablemente condenadas al olvido si no hubiera sido por Nirvana, Smashing Pumpkins, Pearl Jam, Radiohead, y todas las otras bandas que llenaron MTV con su sonido “extraño” para una época dominada por el hard rock menos popular y el hair metal.
Tras irse los noventas, como una guerra que dejó demasiados muertos, heridos, y daños colaterales, se nos vendió otra falsa esperanza: The Strokes. El 30 de julio del 2001, a solo pocos meses del ataque terrorista al World Trade Center de Nueva York, se editó su primer disco, “Is this it”, que conmocionaría a todo el público rockero. Finalmente, volvía el buen rock al MTV, a los videos, a la vida diaria. El primer lanzamiento de The Strokes, era sin duda un himno a lo mejor del rock underground, un tributo a Nueva York siendo un sonido del pasado, dirigiéndose al futuro. Influenciados por The Velvet Underground, Iggy Pop, Television, y el mejor Post Punk inglés, Julian Casablancas y sus colegas lograron hacer vibrar al mundo entero y sobre todo, poner a Nueva York de nuevo en la estratosfera musical global. Por supuesto, que la atención también estuvo puesta hacia esta ciudad por las calamidades del 11 de septiembre, sin embargo The Strokes llevaban una bandera de nueva esperanza. Con ellos, Interpol, Yeah Yeah Yeahs, Stellastarr*, Elefant, todas bandas de Nueva York prometían el cambio tras el desastre. Algunas revistas llamarón a este particular momento de cambio de comienzos de siglo, el “New Rock Revolution”. Sin embargo nada de eso duró verdaderamente, la esperanza desapareció, y la mala calidad del pop se apoderó del mundo.
Una banda de entonces, es sin duda The All American Rejects. Esta banda alternativa es para personas de sentimientos nobles, la cara bien limpia y afeitada, la ropa a la moda y la sana creencia en un rock moderado, para todas las edades. El sonido de The All American Rejects encaja entre el emo, el punk pop, y el pop de radio de pueblo perdido en el que muchos adolescentes, se convencen de que The All American Rejects no es rock n roll y, por dar la contra, empiezan a escuchar a Motorhead. The All American Rejects estarán en Lisboa este 21 de julio. Para más información, visita esta web: http://www.allamericanrejects.com/