Cuando uno llega a París, después de visitar la Torre Eiffel, quiere ir a conocer el Molino Rojo porque en la actualidad sigue ofreciendo un espectáculo único y la mística que tiene ese teatro hace que todos quieran entrar a ver.
Hay más de 60 bailarinas y un total de mil trajes diferentes, con brillos, lentejuelgas, plumas, strass y encaje. Todas son especialistas en el famoso “French Cancan” y hacen vibrar al público al mismo rítmo que la música.
Lo que también llama la atención a los turistas es el molino rojo que realmente tiene construído arriba de su edificio y que gira lleno de luces cada noche. Ubicado en el barrio rojo parisino, en la entrada de Montmartre el Moulin Rouge no deja de abrir sus puertas ni un solo día al año.
Si quieres conocer y disfrutar de la noche parisina alquila apartamentos en París y sal a bailar al ritmo del cancán en elcabaret con más estilo del mundo, el gran Moulin Rouge.