Alba Surís
Budapest es mucho más que una simple foto al Parlamento. Descubre una experiencia personal 100% recomendable.
Jesús Martínez Reneo
Denominada la Perla del Danubio, es para muchos la ciudad más bella de Europa, ideal para conocer en cualquier estación del año, todas y cada una de ellas ofrecen planes alternativos al viajero que acude en busca de cultura caminando sin cesar entre bellos edificios que hicieron eterna a Budapest durante el Imperio Austro-Húngaro. En los doce meses del año podrás tomar un baño en las famosas termas de la ciudad, cruzar el puente de las cadenas, disfrutar de la gastronomía local, sentarte y disfrutar de un caliente café o una fresca cerveza antes de subir hasta Pest para observar una de las vistas más bellas del mundo desde el Bastión de los Pescadores o enamorarnos al instante como si de un flechazo de cupido se tratase con la panorámica del Monte Gellért. Continua tomando un crucero por el Danubio para observar la maravilla arquitectónica del Parlamento más bonito del mundo, asciende los cientos de escalones para observar desde lo alto de la Basílica de San Esteban unas vistas magníficas del centro histórico de la ciudad. No olvides reservar tu entrada para el Teatro de la Ópera de la ciudad, compra productos locales y entiende por qué el Paprika (pimiento) es tan importante en la gastronomía húngara visitando el Mercado Central de Budapest. Disfruta de un domingo en la Isla Margarita haciendo deporte o disfrutando de un calórico american Hot Dog. Descubre pequeños e inmensos tesoros caminando por el distrito 8 de la ciudad, recorre las tiendas de moda en la galería Kiraly Utca, y camina hasta tu apartamento para ducharte, cambiar de ropa y visitar los fascinantes Ruin Pubs,...
Diana Rodríguez Pretel
Budapest ofrece infinitas posibilidades a la hora de celebrar un cumpleaños, un aniversario o cualquier otro evento. Aunque normalmente no tenemos esa imagen de la capital húngara, es una ciudad muy marchosa y animada en la que se os acumularán los planes. Podéis empezar el día en un baño tradicional, ver la puesta de sol cenando en un crucero por el Danubio y acabar de copas en el barrio más bohemio de Budapest: el Barrio Judío. ¡Que empiece la fiesta!.
Diana Rodríguez Pretel
La primavera es una época del año ideal para hacer un alto en el camino y relajarse en un buen balneario. En Budapest el agua es un estilo de vida. Para los húngaros acudir a este tipo de baños o balnearios urbanos es una manera de socializarse y pasar un buen rato con amigos mientras se relajan y charlan de sus cosas. Sin embargo, para un viajero los baños termales de Budapest son una visita obligatoria. Uno de los balnearios más importantes y posiblemente más atractivos de la ciudad es Széchenyi. Está situado justo detrás de la Plaza de los Héroes, una zona noble de toda la vida y hace unos años sólo residía la clase alta de Budapest. Una vez dentro, os sentiréis como en un palacio, en este caso, de principios del siglo XX. Tiene 3 piscinas exteriores y 15 interiores, con una decena de saunas y dos baños turcos. Y sinceramente, haga el tiempo que haga ahí fuera los Baños de Széchenyi se llenas a diario de locales y turistas. Es muy curioso, y enseguida os daréis cuenta, que hay muchos jubilados que van allí a jugar al ajedrez. Montan auténticas timbas a pie de jacuzzi mientras se relajan, en las piscinas exteriores. En la parte superior están las salas de masaje, pedicura y depilación, que por supuesto cobran aparte. La entrada solo al balneario cuesta unos 15 euros el día completo (4.600 florines) y 12 medio día (3.800 florines). No es muy caro teniendo en cuenta que pasaréis un día estupendo a remojo. Otros baños muy famosos de Budapest, además de los de Széchenyi, son los...
The Only Team
El Museo de Artes Aplicadas de Budapest posee objetos con diseño o estética curiosa que pueden aparecer en la vida diaria de cualquier persona.
Mónica Boixeda
No os sorprendáis si os decimos que en Budapest podéis adquirir unas verdaderas joyas de prendas y accesorios enteramente Made in Budapest. La capital de Hungría es hoy en día, un criadero de jóvenes designers que, pese los tiempo que corren, han abierto sus propias tiendas de diseño, y la verdad es que lo han “clavado”. Foto: Nouhailler Las encontraréis en el centro de la ciudad, a poca distancia a pie una de la otra. Aquí os dejamos un listado que os ayudará a identificarlas fácilmente: Printa Akadémia Principalmente es una tienda de artículos para el hogar, pero también es un mix de otras cosas molonas, como taller de serigrafías, galería de arte y cafetería. En pocas palabras es un concept store, el primero de Budapest, en el que el “eco-design” rige toda la filosofía de este espacio polivalente. Aquí podréis tomar un café de comercio justo, comprar muebles de diseño de algún artista local, accesorios para hombres, mujeres y niños y, si os da tiempo, seguir unos de los workshops que se imparten cada poco tiempo. Printa Academia está en el barrio judío, en la calle Rumbach Sebestyén utca 10. Kék Ló Seguimos estando en el barrio judío, esta vez en la calle Kazinczy utca 11. En el Kék Ló, que significa “caballo azul” (pues sí, ¡que cada uno llame a su negocio como quiera!) es una tienda de ropa eco-friendly en la que, además de comprar una prendas hechas a partir de ropa de segunda mano, podréis tomar una cervecita e incluso, fumar (en Hungría sigue siendo legal). Otro aspecto muy interesante del Kék Ló son los precios,...
Diana Rodríguez Pretel
Junto a Budapest y al lago Balaton, Pécs es parada obligada si decidís salir de periplo por Hungría. Es la quinta ciudad más grande del país y allí se vive prácticamente de la cultura, del Art Nouveau y de los museos. Y es que Pécs fue Ciudad de la Cultura 2010 por sus huellas y legado romano, croata, griego, serbio, alemán, turco y judío. Y también es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. A pesar de no ser demasiado grande, era la antigua puerta de los Balcanes y zona de paso para todas estas civilizaciones que fueron transformándola a lo largo de los siglos. A 200 kilómetros de Budapest, Pécs es una escapada perfecta: Un paseo por los museos Si buscáis pinturas post-impresionistas las encontraréis en el Museo de los artistas húngaros (en la calle Janus Pannonius número 11). También es muy aconsejable visitar las ruinas romanas de la Necrópolis paleocristiana de Sopianae, que es del siglo IV y ha sacado a la luz a lo largo de los años más de mil tumbas. Se puede ver a través de una cabina de techo de cristal que se ilumina por las noches (en Szent István tér 12) y tienen especial valor arquitectónico por haber sido excavadas bajo tierra como cámaras funerarias. Y sin olvidarnos de su valor artístico ya que se conservan perfectamente ornamentadas con pinturas murales cristianas. Y para terminar el paseo cultural, la basílica neo-románica de San Pedro que tiene cuatro torres y un museo de la bóveda. Las vistas desde allí son inmejorables. De vinos por la región En Pécs se respira una atmósfera de...
Mónica Boixeda
Budapest tiene un atractivo singular, inolvidable, que la hace distinguirse del resto de ciudades del centro de Europa. Por supuesto está la presencia del hermoso río Danubio, que se impone y atraviesa la ciudad dando a la capital húngara altas connotaciones de elegancia, romanticismo y tradición. Nos faltarían líneas para expresar todas las historias, canciones y mitos que entretejen a este tan famoso río. Budapest durante el invierno, puede llegar a temperaturas muy bajas también, que congelan parte del río y si tienes algo de suerte, una nevada intensa o ligera pintará de blanco las calles de la ciudad, lo que hará del paisaje un mundo aún más fantástico para explorar, descubrir o tomar fotografías. Budapest tiene la particularidad de ser una ciudad relativamente plana. Puedes caminar de un extremo a otro de ésta sin el menor inconveniente, no temas cansarte. Por supuesto el sistema de metro y transporte público es muy eficiente. Sin embargo, si quieres andar largo rato la ciudad te lo permite por su estructura. Eso sí, habrá que abrigarse lo necesario para no pasar demasiado frío. Normafa De igual manera, las cercanías de Budapest te ofrecen muchas opciones si lo que te interesa es la nieve, esquiar y las caminatas. Sn muchos los locales y visitantes los que se acercan a la montaña de Normafa cuando cae la nieve por ejemplo, muy cerca de Budapest. Se puede llegar a esta montaña con transporte público sin el menor problema, tu seguridad está garantizada. Esta zona te permite disfrutar de subidas y bajadas en las que podrás deslizarte con tu artefacto para nieve favorito. Ya sean esquís,...
Mónica Boixeda
La belleza de Budapest no declina con el frío invernal, por el contrario, se hace más interesante recorrerla cuando la bruma y la nieve cubren parcialmente el cálido ambiente humano de esta ciudad. Para que nada empañe sus vacaciones en esta hermosa ciudad y el frío quede fuera de todos los panoramas, le comentaremos algunos secretillos que le ayudarán a contrarrestarlo. No olvides tus guantes, gorros y bufandas que son artículos de primera necesidad en esta ciudad durante el invierno. Si puedes, lleva ropa interior térmica. Los caballeros pueden volver a usar esos sexis calzoncillos largos y camisetas. Las mujeres esas medias mata pasiones, pero que con el frío se llevan bien. Recuerda que la cara y las manos sufren con el frío, así que las cremas son imprescindibles, lo mismo que el bálsamo para los labios. Las aguas calientes (38º) de los baños termales son una fórmula clásica para evitar el frío, ayudar a la salud, contrarrestar el estrés y mejorar la piel. Es una de las fórmulas más usadas en Budapest para hacer de las bajas temperaturas un momento agradable, por eso son una institución en la cultura local. Estas aguas provienen del el fondo de la tierra y marcan el choque de las placas tectónicas entre la planicie de Pest y la colina de Buda. En su tránsito a la superficie acarrean sales minerales que fortalecen la salud, mejoran la circulación sanguínea y ayudan a la tonicidad de toda la piel del cuerpo, por esta razón han sido considerados medicinales. Hay cerca de 100 baños públicos termales, siendo uno de los más famosos Ruda que fue construido hace...
Mónica Boixeda
Budapest es una ciudad ciertamente hermosa para caminar y explorar sus diversas zonas y distritos. La presencia del Danubio por su puesto la convierte en un destino inevitable de románticos y viajeros buscando un momento de ensueño, pero son también la cantidad de áreas verdes con que esta ciudad cuenta la que hacen de su visita, además de una exploración cultural profunda, un lugar donde respirar aire puro y compartir un buen rato al aire libre. Budapest está divida en dos partes que le dan su nombre: Buda y Pest. Desde el área de Buda, que tiene un nivel de altura superior, colina, se puede observar el lado de Pest con mucha precisión y tener una mejor perspectiva de la ciudad. Si bien la primavera es probablemente el mejor tiempo para visitar cualquier ciudad europea, el otoño o el invierno en Budapest pueden ser más que atractivos; recorridos por sus parques de hojas secas y árboles ya desnudos por el clima, crean una atmósfera de nostalgia y magia muy singulares. Para empezar el recorrido de parques por Budapest, es indispensable visitar el Varosliget o parque de la ciudad. Este es el parque más grande de toda la ciudad y es un gran atractivo para realizar vida al aire libre, leer un libro o hacer un pic nic. El parque tiene además diversos atractivos, entre ellos el Castillo Vajdahunyad que data del siglo XIX. También, podrás encontrar un hermoso lago en el parque donde se puede remar durante el verano y patinar sobre hielo en el invierno. Del mismo modo, el Zoológico de Budapest se encuentra ahí, hay un parque...