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Palio di Siena

El 16 de agosto tendrá lugar  la segunda y última carrera en Piazza del Campo en Siena. ¿Pero que es el Palio di Siena? Es una carrera de caballos sin silla montados por  jinetes, cada uno de los cuales representa a una “contrada” de Siena, o sea, a un distrito. La competición tiene las características de un torneo ecuestre. Ese toque medieval junto a la preciosa estructura de la Piazza y sus edificios que sirven de escenario, lo convierten en un acontecimiento digno de ver. Sus raíces y sus tradiciones son bastantes antiguas y han perdurado en el tiempo. De hecho, no podemos definirla como una simple carrera de caballos, ya que también reúne características históricas y una pasión  única por parte de los participantes.

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Antes de empezar la carrera de caballos, a cada contrada le se da un caballo, la competición consiste en correr tres veces la Piazza del Campo y la contrada que gana recibe el Palio, es decir, una pintura sobre seda de forma rectangular que tradicionalmente se usaba para decorar las iglesias.  Durante las celebraciones, el jinete se lleva el triunfo y la contrada que gana el Palio canta en la iglesia una canción de agradecimiento. Los festejos se alargan durante varias semanas.

Le Contrade di Siena

La ciudad de Siena está dividida en 17 contradas (distritos) que tienen nombres muy particulares y a menudo de animales. Cada contrada tiene un blasón y una bandera con pinturas bonitas.

Cómo asistir al Palio de Siena

Para asistir al Palio se puede ir gratuitamente a la plaza, pero con la muchedumbre la visión podrá resultar casi imposible. Por ello, os aconsejo tomar un asiento en el escenario o mirarlo desde los balcones del evento pero esta vez pagando. Para comprar los asientos hay que hacerlo un año antes y los precios son desde los 400 euros, más o menos. Incluso es posible participar en las cenas organizadas antes del Palio para disfrutar de la noche con alegría y entrando en la atmósfera del Palio.

Visita Siena, visita el Medioevo

Pasear por las calles del centro histórico lleno de monumentos maravillosos, la Catedral y Piazza del Campo; visitar Siena es como ir paseando por el tiempo atrás y ¡volver al Medioevo! Cuando termine la jornada, os aconsejo ir a tomar un buen aperitivo italiano en uno de los bares de la ciudad para relajarse y para disfrutar del ambiente festivo de estos días.