Tapas españolas – una tradición española

Hablar de comida en España es hablar de la famosa tradición culinaria de las tapas. El tapeo arrastra alguna que otra leyenda, entre ellas, hay quien dice las tapas surgieron hace ya muchos siglos, cuando el rey de España Alfonso XX el Sabio se vio obligado a comer pequeños tentempiés debido a una enfermedad.

Pero la auténtica teoría es otra bien distinta… Las tapas aparecieron gracias a que a los trabajadores les entraba hambre a media mañana y necesitaban comer algo antes de la hora del almuerzo. Así, las primeras tapas aparecieron en Andalucía –cuna del tapeo –, donde los hambrientos trabajadores cubrían sus copas de jerez con rebanadas de pan para evitar que las moscas que colasen en su bebida. Al poco tiempo, los taberneros empezaron a servir aperitivos con el pan, y las tapas (del verbo tapar) empezaron a popularizarse. Tanto es así, que el tapeo español se ha extendido por todo el mundo.

Hoy en día, ir de tapas constituye la manera más rápida y eficaz de comer cuando el tiempo escasea y se quiere disfrutar de un menú variado. Pero éstas no están pensadas especialmente para la hora del almuerzo: ¡uno se puede ir de tapas a cualquier hora del día! Lo que realmente importa es saciar el apetito.

Hay tantas recetas y variedades de tapas como regiones hay en España. En cada lugar tienen sus propias especialidades, pero sí es cierto que hay algunas comunes que comparten todas como: las olivas, los frutos secos, una gran variedad de embutidos, carnes, pescados y algunos vegetales.

Uno de los mejores ejemplo en lo que a bares de tapas se refiere se encuentra en Barcelona y se llama bar Tomás. Este popular establecimiento abrió sus puertas hace ya sesenta años y es famoso en toda Cataluña por sus patatas bravas. Situado en Sarriá, es una parada que todo el mundo debería hacer por lo menos una vez en la vida.

El Rey de España no se pierde una visita al bar Tomás cada vez que pasa por Barcelona. Además de las deliciosas patatas bravas, ofrece una gran variedad de tapas de todos los estilos. Cada miércoles el Tomás cierra, y lo dueños abren un bar en la trasera del mismo, llamado Iborra, donde se sirven las mismas suculentas patatas bravas. La gente suele decir que si Dios fuera una patata brava, sería una brava del Bar Tomás. ¿No es increíble?

Si quieres descubrir el cielo, prueba todas y cada una de las especialidades culinarias más tradicionales de la cocina española. ¡Las tapas no te dejarán indiferente! Seguramente querrás repetir.