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Si quieres seguir los pasos de los aristócratas decimonónicos que encontraron en las playas francesas su lugar ideal para pasar las vacaciones, sigue leyendo, porque hoy exploraremos la bella ciudad de Niza.
Niza es la ciudad más activa y apasionante de la Riviera Francesa. Su singular combinación de glamour francés y arquitectura italiana, además de su caluroso clima mediterráneo, un mar azul y playas como ningunas otras en el mundo, la convierten en un destino perfecto para las vacaciones.
La amplia oferta de atracciones turísticas que puedes encontrar en Niza solo se puede comparar a lo que te encontrarías en ciudades como París. Para la gente que se pregunte qué visitar en Niza, hemos hecho una lista de nuestras recomendaciones personales.
Foto: RudolfSimon
Catedral de Santa Reparata
Adornando el casco antiguo de la ciudad, la famosa Catedral de Santa Reparata es una joya arquitectónica de Niza. Situada en la famosa Place Rossetti, la catedral está rodeada de cafeterías, bares y restaurantes que conforman un ambiente fresco y con encanto.
Esta preciosa catedral barroca se terminó en el año 1699 y atrae a turistas de todo el mundo debido a su impresionante campana del s.XVIII y su cúpula adornada con azulejos. Después de visitar la catedral, no te pierdas un helado de la Gelateria Fenocchio.
Capilla de la Misericordia
A un paso de la Catedral de Santa Reparata encontramos la bella Capilla de la Misericordia. Esta capilla barroca del s.XVII está situada en el famoso barrio de Cours Saleya y se considera como uno de los 10 edificios barrocos de más belleza de todo el mundo. Si te gusta la arquitectura, este es un lugar que no te querrás perder.
Mercado Cours Saleya
Si te gustan las flores, no hay mejor lugar que el famoso Mercado de Flores de Niza en el Cours Saleya. El aroma de los cientos de flores que están expuestas en este famoso mercado te llenarán de manera abrumadora. En el Cours Saleya también puedes encontrar frutas, verduras e incluso pasteles y especies, así que si estabas planeando en cocinar durante tus vacaciones no encontrarás un lugar mejor para comprar productos frescos. Además de las flores y las hortalizas frescas, te enamorarás de sus coloridas calles rodeadas de preciosos edificios y las sonrisas de los tenderos.
Plaza Saint-François
Esta plaza es todo lo que queda de un famoso convento franciscano del s.XVIII que fue abandonado justo antes de la Revolución Francesa. Hoy en día, la plaza atrae a turistas y autóctonos, no solo por sus edificios pintorescos sino también por su genial mercado de pescado. Allí podrás comprar pescado y marisco local en un ambiente realmente singular que sin duda dejará satisfechos a tus sentidos.
Jardín Albert 1er
Si quieres tomarte un respiro de todo el bullicio de la ciudad, el jardín Albert 1er es el lugar perfecto para escapar de todo el ruido. Construido en el s.XIX, este precioso parque es uno de los más antiguos de la ciudad. No te pierdas la oportunidad de visitar el parque y atender una de las muchas actuaciones al aire libre que te llevarán un poco más cerca a la cultura francesa.
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