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Si bien Berlín y la música siempre han ido de alguna manera de la mano, bien es cierto que el verano es tal vez en la capital alemana la época más propicia desde hace siglos para la expresión de esa condición a la que según Walter Pater aspira todo arte, ese misterio abstracto y concreto a la vez en el que según la tradición pitagórico-hermética se cifra todo el secreto del universo. Según sugiere la física de vanguardia, ¿no es acaso en rigor por ventura, todo lo que hay y siempre ha existido una vibración de cuerdas?
De esta importancia de la música en la vida estival de los berlineses da prueba el prestigioso Citadel Music Festival, que desde comienzos de junio hasta finales de agosto lleva a la imponente ciudadela renacentista de Spandau de la capital alemana una amplia y variada gama de artistas internacionales. El espectro es verdaderamente pasmoso, e incluye tanto a auténticas leyendas vivas de la cultura contemporánea del último medio siglo, tales como Lou Reed o Bob Dylan como a nuevas bandas tan refrescantes como los británicos Kitty, Daisy and Lewis, abanderados desde su luminosamente arrogante juventud de un estimulante y excitante revival de las formas más añejas del rockabilly, el blues, el country, el swing y el rhythm and blues. Entre ambos extremos hay asimismo espacio durante los meses de verano para actuaciones de clásicos de diferentes géneros que se resisten a abandonar por completo la escena, tales como Billy Idol, Lynyrd Skynyrd, Snow Patrol o los siempre poderosos The Pogues.
Sin embargo, dentro de este extensísimo programa desearíamos dirigir concretamente la atención al festival Heimspiel del día 13 de julio (http://citadel-music-festival.de/events/heimspiel-2012), que nos dará la oportunidad de comprobar el estado de salud de la escena rock alemana actual, algo siempre aconsejable a tenor del profundo impacto que bandas germanas como Popol Vuh, Kraftwerk, Neu!, Amon Düül II o Einstürzende Neubauten han tenido en la música alternativa de los últimos 40 años y del recuerdo de la vibrante actividad musical underground en el Berlín de las últimas décadas del siglo XX.
El Heimspiel nos pemitirá apreciar el estado de forma de seis de las bandas más representativas del rock alemán contemporáneo y de entre las más dilectas para los berlineses: Jennifer Rostock, Jupiter Jones, Dendemann, Thees Uhlmann, Ichkannfliegen y Und Freunde. A los primeros, ídolos locales absolutos capaces de llenar el aforo en varios conciertos sucesivos, les precede la leyenda de su majestuoso, inolvidable directo. En cuanto a Jupiter Jones, probablemente estemos hablando de la formación más masivamente popular de todo el cartel en estos momentos como evidencia su triunfal último año en el que han conseguido ser disco platino. Tal vez menos famosos, el resto de las bandas han conseguido consolidar un seguimiento lo suficientemente fiel amplio y establecer Berlín, pese a proceder en algunos casos de otras ciudades, como su centro neurálgico de operaciones.
Si alquila apartamentos en Berlín y quiere sumergirse en la atmósfera creada por algunos de los grupos alemanes más representativos del momento, no se pierda este concierto.
