El Palacio Real de Milán hoy en día es un centro cultural, sede de exposiciones de arte, de eventos sociales y culturales. En la antigüedad, el edificio era ocupado por el gobierno y allí se llevaban a cabo actividades administrativas y nadie le prestaba la atención que merecía a la construcción en sí misma.
El Palacio se encuentra en la Piazza Duomo, a un costado de la catedral, muy cerca de la calle Vittorio Emanuele.
Parte de su fachada e interior se perdió durante la Segunda Guerra Mundial por culpa de los bombardeos incesantes que coparon la ciudad. El estilo neoclásico de antaño se perdió casi en su totalidad pero cuando restauraron y reformaron el Palacio Real también lo dejaron lindo y bello por dentro.
En el Siglo XVIII, se termina de construir y la entrada del edificio se organiza según la catedral que tiene al lado.»Piazzetta reale» se denomina a esa entrada especial que tiene el Palacio hoy en día.
Las puertas de este hermoso palacio están abiertas al público y todo el que quiera puede pasar a conocerlo por dentro. Es un punto turístico que no puedes dejar de visitar.
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