End Google Tag Manager -->



El lujo de patinar por los canales de Ámsterdam

En contadas ocasiones los canales de Ámsterdam se transforman en largas pistas de patinaje sobre hielo. No es un fenómeno que ocurra todos los años, de hecho es muy difícil verlo, pero cuando sucede, la estampa invernal de la ciudad es inmejorable. La gente se echa a la calle porque para ellos es un auténtico acontecimiento nacional. Desde luego, patinar por los canales de Ámsterdam es una experiencia mágica.

Atención a los aficionados a los deportes de invierno: Ámsterdam se convierte en la Meca del patinaje cuando se hielan sus canales. Este fenómeno no es demasiado habitual y, precisamente por eso, se ha convertido en un atractivo turístico. Cada vez son más los visitantes que por estas fechas visitan la ciudad con la esperanza de llegar a ver esa bucólica estampa.

ice skating amsterdam

Por lo general, para poder ver este fenómeno, las temperaturas deben mantenerse por debajo de los 4 grados bajo cero durante 4 o 5 noches consecutivas. Esto suele ocurrir durante los meses más fríos, enero y febrero, cuando entra en el país el helador viento siberiano. Sólo cuando el hielo mide un mínimo de 15 centímetros, el Gobierno de la ciudad da permiso para recorrer de lado a lado los canales.  Mientras el grosor no llegue al mínimo está terminantemente prohibido pisar el hielo porque puede ser peligroso. Cuando alcanza los 30 centímetros es posible celebrar un concierto de música clásica sobre el hielo.

El más conocido, y uno de los más antiguos de Ámsterdam, es el Keizergracht, donde se improvisan puestos callejeros de dulces, chocolate, vino caliente con especias (llamado glühwein) e incluso puestos que venden la típica sopa de guisantes holandesa (erwtensoep).

Cuando se congelan los canales, el tráfico naval se paraliza para dar paso a cientos de patinadores que no quieren perderse una ocasión única. Durante unos días dejan de pasar yates y botes turísticos. Ahora son las familias, las parejas o simplemente los grupos de amigos los que toman las calles improvisadas. Aquí la prioridad la tiene siempre el peatón (o en este caso el patinador). Por cierto, también es posible recorrerlos en trineo o a pie. Eso sí, con mucho cuidado.

La afición de los holandeses por el patinaje viene de lejos. De hecho, ya en algunos cuadros costumbristas del siglo XVII de pintores muy conocidos allí como Salomon Jacobsz van Ruysdael o Jacob Grimmer, ya se reflejaban escenas de patinaje sobre los canales helados de Ámsterdam.

Hendrick_Avercamp_-_A_Scene_on_the_Ice_-_WGA01076

Deslizarse por sus canales es casi un deporte nacional. Y tal es la afición de algunos holandeses por este deporte invernal, que durante la época de frío consultan constantemente el parte meteorológico para saber con antelación si el agua se va a solidificar o no. Por esta razón, y mil razones más que descubriréis estando en Ámsterdam, en 2010 sus canales entraron en la lista de lugares que son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

La imagen de los canales congelados siempre da la vuelta al mundo.  Hay que reconocer que es una estampa bucólica donde las haya. Una imagen de postal.

@DianaRPretel