¿Por qué los Reyes Magos eran tres?

Por fin llegó la gran noche. Esa en la que pequeños y mayores compartimos la ilusión de recibir la visita de sus Majestades los Reyes Magos de Oriente en nuestras casas, esperando que hayan leído nuestras cartas y nuestros deseos se hagan realidad.

Sin duda, es una noche mágica. Y es que ya lo fue hace más de 2000 años, cuando estos tres señores decidieron emprender su viaje detrás de una estrella.  Porque los Reyes eran magos pero, sobre todo, eran viajeros.

Pero ¿os habéis preguntado alguna vez por qué los Reyes Magos eran tres? Por supuesto, el número 3 encierra todo un simbolismo en sí mismo que impregna gran parte de nuestra tradición literaria y religiosa. Pero hoy hemos querido darle una vuelta más. Queremos indagar en las posibilidades de este número impar para descubrir qué es lo que lo hace tan mágico. Ahí va una lista de cosas que son mejores de 3 en 3:

 

Los fines de semana de 3 días

Esas mini vacaciones, ese respiro inesperado en mitad de la temporada de trabajo. Justo cuando tus fuerzas empiezan a flaquear, el santoral o la historia te regalan un día extra en tu fin de semana para que puedas contar hasta 3 y volver a la carga con las pilas a tope.

A la tercera va la vencida

Ya llevas dos intentos fallidos. Dos veces esforzándote por alcanzar lo que sea… y en lugar de hundirte en la derrota, te agarras a la frase más optimista y casi del todo cierta que conoces: “a la tercera va la vencida” y te lanzas a intentarlo con todas tus ganas confiando en que esta vez por fin sí. ¿Acaso existe otro número capaz de infundir tanto positivismo?

Comer a las 3 de la tarde

Si quieres saber si un español está de vacaciones, pregúntale a qué hora come. Sentarte a la mesa a partir de las 15h es el síntoma más evidente de que estás en tu tiempo de relax, sin horarios, sin prisas. Justo después del vermut, un poco antes de la sobremesa. Todo el mundo sabe que las 15h es la hora perfecta para la paellita del domingo.

La tercera respuesta en un examen tipo test

Puede ser la opción que te haga dudar o la que te salve de la confusión. Cuando aparecen dos respuestas ambiguas para esa pregunta impertinente, sabes que la frase “Todas las anteriores son verdaderas/falsas” es lo que estabas buscando. De pronto, todas tus dudas se disipan. Obviamente, la tercera opción es la correcta.

3 deseos de la lámpara mágica

 

Ni dos, ni cinco. El genio concedió a Aladín 3 deseos. El primero, el que se pide sin pensar, por impulso. El segundo, para gastar en el capricho más ridículo. Y el tercero y último, el verdadero, aquello que realmente ansías.

¿Se os ocurren más cosas que son mejores de 3 en 3?