En unos días dará comienzo la Feria de Abril, la archiconocida festividad de la capital andaluza. Sobre ésta hay mucho escrito, por eso este año hemos querido dedicarle un post más práctico, que denominaremos popularmente «el diccionario del feriante», con las palabras básicas que un debutante debe conocer, y que por otra parte resultaran cómicamente usuales a cualquier sevillano de pura cepa.
Si algo tengo claro es que si vienes con la lección aprendida y dispuesto a pasarlo bien, vivirás una experiencia inolvidable.
Antes de empezar, deberías saber qué es…
EL REAL: este es el nombre que recibe el recinto ferial, un millón de metros cuadrados de albero (arena anaranjada que cubre las plazas de toros) que se distribuye en 15 calles que homenajean a distintas figuras del toreo español (Juan Belmonte, Pepe Hillo…). Una buena forma de recorrerla es en coche de caballos, pues sus dimensiones son mucho más grandes de lo que puedan parecer en un inicio.
LA MAESTRANZA: así se denomina la Plaza de Toros de Sevilla, una de las que más solera tiene de España. Especialmente en feria, ofrece espectáculos taurinos, aunque si no te va mucho este rollo, al menos puede ser curiosa una visita a su museo, porque la plaza es realmente llamativa.
LA PORTADA: es la entrada «oficial» a la feria. Cada año se construye una nueva con un motivo diferente. Este año está inspirada en el Pabellón de Argentina de la Exposición Universal de 1929.
CASETAS: son construcciones de lona con techo a dos aguas de color rojo y blanco o rojo y verde a rayas. En ellas se reúnen sus socios para comer, beber y bailar. En total hay 1.051 casetas, siendo sólo 20 de ellas de acceso libre. Este puede ser el punto más negativo para el visitante, que si no tiene contactos en la capital hispalense puede verse desesperado por no poder entrar en casi ninguna caseta.
LA CALLE DEL INFIERNO: es un parque de atracciones para los más pequeños distribuido en uno de los laterales de la feria. Desde la noria a los coches de choque y tómbolas, un sinfín de ruido y luces que puede volverte algo loco, de ahí le vendrá el nombre.
EL PESCAÍTO: el lunes cada caseta celebra su cena de inicio de feria, conocida como «pescaíto» (no hace falta decir que el plato estrella es el pescado frito ¿no?). La gente prepara sus mejores galas para esta ocasión pero ¡ojo! las mujeres NO van vestidas de flamenca (eso es a partir del martes).
EL ALUMBRAO: a las 00:00 de la noche del martes 12 de abril se encienden las 24.000 bombillas de la portada e implica la apertura de la fiesta.
FUEGOS ARTIFICIALES: la feria termina la noche del domingo con el lanzamiento de fuegos artificiales que puede oírse en cada esquina de Sevilla, poniendo así el fin de fiestas.
Atuendo feriante:
Mujer:
TRAJE DE FLAMENCA: como sevillana digo sin pudor alguno que el traje de gitana es el vestido regional más bonito y favorecedor con diferencia (non ofense :P), y es que realza la figura femenina como ningún otro. A todas sienta bien. Eso sí, también es el único traje tradicional que pasa de moda, y que se actualiza cada año siguiendo las tendencias (por ejemplo este año se va a llevar mucho la inspiración mexicana, con grandes volantes, flores variadas y hombros al aire). El secreto de cómo vamos al baño las mujeres que nos decantamos por lucir uno de estos historiados trajes sólo lo conocemos nosotras mismas (y la/s acompañante/s que necesitamos), pero os podemos asegurar que yendo tan embutidas suele ser complicado.
LAS ESPARTO: este es el nombre que reciben las alpargatas típicas de cinta que son el calzado más cómodo y usado con el traje de flamenca.
COMPLEMENTOS: los más típicos son el mantoncillo de flecos, la peineta, la flor y los pendientes grandes.
Hombre:
TRAJE DE CORTO: aunque es cierto que este traje compuesto por camisa blanca, fajín, chaqueta y pantalón grises, sombrero y botos, es el uniforme masculino, lo cierto es que sólo los niños y los que montan a caballo llevan tal atuendo. Por lo general, los hombres van en traje de chaqueta y camisa, con algún detalle flamenco como un pañuelo o un clavel en la solapa.
La versión femenina de este traje típico suele llevar falda y permite a las mujeres montar a caballo de lado yendo »a la amazona».
Para los profanos en la materia, advertimos que ir a la feria en chanclas o en pantalón corto es para nosotros una »falta de etiqueta». Para los sevillanos la Feria es uno de los momentos más esperados del año y es por eso que nos engalanamos tanto. Aunque la mayoría comprendemos que la gente de fuera no está tan advertida de este hecho a lo mejor recibes miradas de soslayo si te decides por un atuendo playero.
Qué se hace en la feria: COMER, BEBER y BAILAR:
SEVILLANAS: baile folklórico por excelencia, ligado al flamenco. Se compone de 4 canciones con pasos diferentes y se bailan en pareja. Si nunca lo has probado, te animo a que te dejes guiar por un compañero que sepa y te lo pases bien aprendiendo algo. Los más flamencos acompañan la música de palmas o hacen sonar una caña al ritmo de la música.
Top 5 sevillanas que no pueden faltar:
- Mírala cara a cara
- Por el puente de Triana pasa la reina
- Me casé con un enano pá’hartarme de reír
- Sueña la margarita con ser romero
- Y una de las que nos parece más cómica, La sevillana de los Pijos.
Las rumbas relajan el ambiente entre sevillana y sevillana y si cuentas con una caseta animada, las charangas te sacarán a bailar con éxitos de ayer y de hoy (más bien de ayer) como Paquito el Chocolatero o la Bomba, pero esto sucede solamente a altas horas de la noche.
REBUJITO: en feria se bebe rebujito, una mezcla de SevenUp y manzanilla con hielo que se bebe en catavinos y que, pese a que está desaparecido el resto del año, de repente esa semana parece ser nuestra bebida favorita. ¡Tened cuidado con aquellas casetas en las que os complementen la jarra de este fresquito elixir con un poco de agua del grifo! Aunque vayas con dos jarras ya puestas la diferencia se nota…
Platos típicos: si bien comer «es lo de menos», no te irás de la feria sin comer pimientos fritos, adobo, tortilla de patatas y algún montaíto de lomo. Si eres menos »agarrao», podrás disfrutar de jamón del bueno y gambitas blancas de Huelva en muchas casetas.
El olor también abrirá tu apetito más dulce, y caerán gigantes algodones de azúcar, manzanas con caramelo y gofres de chocolate.
LA CAVA DE LOS GITANOS Y SUS BUÑUELOS: en el extremo contrario a la calle del infierno se sitúa la cava de los gitanos, donde varias familias gitanas se reúnen en una plaza y preparan un chocolate caliente con buñuelos que te sentará de gloria antes de volverte a casa. La decoración de sus casetas es cuanto menos peculiar, llena de piquillos, bordados, volantitos y lazos. Merece la pena pasarse por allí.
Bueno, yo creo que con esta puesta a punto ya estás listo para encaminarte a la Feria de Abril. Olé, nos vemos en el Real :D.
Escrito por Claudia Campos, de Los viajes de Claudia