Español
La ciudad que nunca duerme se prepara para la llegada de la voz del momento, la neozelandesa Kimbra, que actuará durante dos noches (19 y 20 de octubre) en uno de los locales nocturnos más emblemáticos de Manhattan. Si vas a estar en octubre en Nueva York y eres de los viajeros amantes de la música que gusta de descubrir nuevos talentos, ésta es, sin duda, una cita obligatoria para ti.
Esta jovencita llamada Kimbra tenía claro desde su más tierna infancia que lo suyo era la música. A los 10 años, ya componía sus propias canciones y daba sus primeras actuaciones. Con solo 12 años, interpreta el himno nacional de Nueva Zelanda en la apertura de un partido de rugby, ante una audiencia de cerca de 30.000 personas, y recibe su primera guitarra, un regalo de su padre. Comenzó entonces sus clases de música, pero su prodigiosa voz es un talento natural que ha ido desarrollando de forma autodidacta. A los 17 años, se traslada a Melbourne para desarrollar su carrera. Durante este periodo, de intensa creatividad y actuaciones en directo, el músico belga-australiano Gotye presencia uno de sus conciertos y la invita a colaborar con él en uno de los singles de su disco Making Mirrors. La canción, titulada Somebody I used to know (todo un éxito internacional cuyo vídeo alcanza en Youtube los 300 millones de visitas), supuso su lanzamiento a la fama y un espaldarazo para la salida de su primer álbum de estudio, Vows, a finales de agosto de 2011. Un disco autoproducido, grabado entre varios estudios y su casa, en el que ha invertido 3 años y cuyo éxito no se ha hecho esperar.
Kimbra, con apenas 22 años, ha encandilado por igual a crítica y público con su voz densa y profunda y canciones que coquetean con el jazz, el soul, el rock alternativo y la electrónica. Las inevitables comparaciones en esta industria la sitúan entre Nina Simone, Björk y Jeff Buckley.
Inmersa en su primera gira internacional, hará su parada en Nueva York en la sala Webster Hall. Situado en el corazón del East Village, este club nocturno fue creado en 1886 y posee un gran valor histórico en la ciudad. En los años 20, era famoso por sus bailes de máscaras y un ambiente bohemio, y Scott Fitzgerald era uno de sus incondicionales. Actualmente, es la mayor discoteca de la ciudad y un referente en cuanto a la música en directo de Nueva York.
East Village es un barrio asociado a la cultura alternativa y musical de Manhattan. Durante el S. XIX, era hogar de la alta sociedad y todavía pueden admirarse algunos solemnes edificios de aquella época. En el s. XX osciló entre la marginalidad y la popularidad que le imprimían la llegada de artistas. Andy Warhol, la generación beat y el mítico local punk CBGBC son sus principales iconos. Actualmente, es más burgués y muchos profesionales liberales residen aquí. Algunos lugares interesantes a visitar son: la iglesia St. Mark in Bowery, la calle St. Mark’s Place, el parque Tompkins Square y el Museo Ucraniano.
Para acudir al concierto, reserva uno de nuestros apartamentos en Nueva York ubicado en el East Village y podrás descubrir los encantos de este icónico barrio y sumergirte en la vida local.
