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Ya es Navidad en Rockefeller Center

No es Navidad para los neoyorquinos hasta que no se ilumina el famoso árbol que preside Rockefeller Center, en Midtown Manhattan. Es una tradición que suma ya 7 décadas. Más de 70 años de vida y a sus pies, siempre la tradicional pista de hielo que cada año atrae a miles de personas y que, sin duda, se ha convertido en todo un símbolo de Manhattan en estas fechas. Nos vestimos de gala para conocer el abeto más elegante y mágico de Nueva York.

Eislaufen-Rockefeller-Center

Este año, el árbol cuenta con una espectacular iluminación LED que seguro que no dejará indiferente a nadie. Las luces tiñen de color la plaza, las calles aledañas, los teatros y las tiendas. Más de 40.000 bombillas multicolores visten de gala la plaza y arriba, coronando el árbol, luce una impresionante estrella de Swarovski fabricada con unos 20.000 cristales. Es una auténtica joya y, por supuesto, está custodiada las 24 horas para que nadie caiga en la tentación de llevársela a casa.

A los que os guste patinar sobre hielo, Rockefeller Center es un lugar excepcional para hacerlo. Es todo un clásico ir a patinar allí en Navidad. Y desde luego es una experiencia increíble poder formar parte, al menos durante un rato, de un espacio tan idílico como este. De hecho es el escenario de muchas películas, igual que la ciudad de Nueva York. Lugares y rincones que todos reconocemos y que, cuando los visitamos por primera vez, es como si ya hubiésemos estado antes. Y eso se debe a la infinidad de series y películas que se han rodado allí.

Por octavo año consecutivo, el abeto gigante del corazón de Rockefeller Center va a ser talado y después donado a “Habitat for Humanity”, una ONG que usa su madera para construir después viviendas de carácter social. Por cierto, el árbol también fue donado en su momento por la familia Vargoshe de Shelton, en Connecticut, a la ciudad de Nueva York. Sin duda, la visita a esta céntrica plaza es obligatoria si vais por allí en estas fechas y si no, también.

Desde el 3 de diciembre y hasta el 7 de enero, este enorme abeto septuagenario que mide 23 metros de altura, preside con gran estilo Rockefeller Center. Ya sabéis que la plaza está entre la Quinta y la Sexta Avenida. Allí está el edificio Top Of The Rock, y desde allí podréis disfrutar de las mejores vistas al Empire State. Son impresionantes por la mañana, la tarde o la noche. También se ve el edificio Chrysler, Times Square, Central Park, las principales avenidas, el Puente de Brooklyn y, como no, la torre más alta de la ciudad: La Torre de la Libertad o One World Trade Center, levantada después del terrible atentado contra las Torres Gemelas. Os aseguro que, si reserváis con antelación la subida al Top of the Rock, encontraréis las mejores vistas de la ciudad, me atrevería a decir que incluso mejores que desde el Empire State. Más que nada porque desde el Empire no se ve el Empire.