Lo mejor de Florencia en 5 pasos

No es sólo la ciudad de las flores. No es sólo la cuna del Renacimiento. Florencia es mucho más. Es la ciudad más famosa de la Toscana italiana y, sobre todo, sus obras suelen tener un hueco muy especial en los libros de arte. Florencia es mucho más que un museo gigante, pero su obras la han catapultado a la fama mundial. No tiene nada que envidiarle a Roma. Y quien diga lo contrario, es que no la conoce. Os propongo descubrir Florencia en sólo 5 pasos.

1. El David de Miguel Ángel, de cerca

Los libros de arte están llenos de referencias a esta esbelta y musculosa estatua de mármol blanco de 5,17 metros de altura. Un imponente David que representa el momento previo a su famoso enfrentamiento contra Goliat. Y aunque muchos crean que el David de Miguel Ángel se conserva en un museo romano, no es así. De hecho, es un error muy común. Su verdadero hogar es la Galería de la Academia, donde se puede visitar desde 1873. Antes estuvo expuesta en el Puente Vecchio y en la Piazza della Signoria, pero el viento y los efectos de la climatología obligaron a trasladar la obra a un lugar seguro.

2. Pisa la Catedral de Santa María de las Flores

A caballo entre el arte gótico y el Renacimiento, este impresionante templo se ha convertido en todo un símbolo de la ciudad. ¿Sabíais que fue construida sobre la antigua catedral de Santa Reparata? Pues sí. Se quedó pequeña para atender a todos los fieles que la visitaban y se decidió levantarla de nuevo. Ahora es la cuarta iglesia más grande del Planeta, después de San Pedro (El Vaticano). Y un consejo: Si estáis dispuestos a subir más de 430 escalones, os recomiendo visitar la cúpula de ladrillo del gran Brunelleschi. Aunque parezca duro, os aseguro que el esfuerzo habrá merecido la pena.

3. De paseo por el Ponte Vecchio (Puente Viejo)

Caminar sin rumbo por el puente más famoso de Florencia es una de las primeras cosas que debéis hacer cuando viajéis allí. No sólo debéis saber que cruza el río Arno y que es uno de los puentes de piedra más antiguos de Europa, sino que a día de hoy es uno de los símbolos del romanticismo. Es  habitual que se acerquen por allí los fans de Federico Moccia. Cada año miles de enamorados cuelgan sus candados con el objetivo de perpetuar su amor. Tal ha sido el éxito de la saga, que las autoridades de la ciudad se ven obligadas a retirarlos de vez en cuando por seguridad y también para limpiar la zona. En la actualidad, además de candados encontraréis decenas de joyerías: ahí nace la calle del oro y la plata.

4. Prueba la mejor pizza de la ciudad

¿Os gusta la masa esponjosa? Pues para esponjosa, la de la Pizzería Spera. Un  pequeño local que comenzó como un negocio familiar y que se ha convertido en una referencia culinaria de Florencia. Y no lo digo yo, sino que varios rankings la sitúan en el primer puesto. Su fama es tal, que ha llegado a ganar incluso varios premios internacionales. Así que si queréis probar la mejor pizza napolitana-florentina, ahí van las coordenadas: Vía della Cernaia.

5. Piérdete en los mercados

No os podéis ir de Florencia sin conocer sus mercados. Mercados de flores, de artesanía, astronómicos y de arte. Mi recomendación es parar como mínimo en el Mercado Central (especializado en alimentación), el de San Lorenzo (donde podréis comprar ropa o artículos de cuero) y en el Mercado de las Pulgas (para comprar cosas como antigüedades, muebles, joyas, sellos y monedas). Pasaréis un rato estupendo de compras y, lo más importante, conoceréis Florencia a través de sus mercados.

Twitter: @DianaRPretel